Se va un presidente -por primera vez- sin ser rajado a patadas en esta etapa post dictadura.
Sin hiper ni saqueos, sin escándalos, sin pelotudez crónica.
Dirán los hipercríticos: "pero hay inflación", "pero está Skanka y el INDEC", "pero deja a ´la mujer´"
Diremos otros: crecimiento sin inflación es negocio de banqueros, al lado de Carlo esto es el cielo incorruptible, a la "mujer" la votamos los argentinos.
Lo cierto es que en lugar de cacerolazos, pizza y champán y helicópteros, habrá una fiesta en la Plaza para cantar, una vez aunque sea, y para decir "gracias".
Ojalá siempre sea así.
Muy oficialista, no? Y bueno... alguna vez me toca, que joder !!!